¿QUIÉN FUE JACKIE ROBINSON?
Jack Roosevelt Robinson nació el 31 de enero de 1919 en los campos algodoneros de Cairo, Georgia, EEUU, siendo nieto de un esclavo e hijo de un cultivador.
En 1944 llegó a ser teniente de segunda pero una serie de injusticias hizo que pidiera ser dejado en libertad (no quería seguir continuando con la carrera militar), recibiendo una honorable baja, y comenzó a buscar empleo.
Se había destacado en cuatro disciplinas deportivas en la Universidad de California, antes de enlistarse en el ejército. Lideró la liga de baloncesto en anotaciones en dos oportunidades, rompió el récord nacional de salto largo, que se encontraba en poder de su propio hermano, además de su destacada actuación en el fútbol americano. También ganó torneos de tenis, ping pong y golf. (Su reputación nacional como atleta, quizá explica que los cargos más ridículos en su contra fueron descartados antes que comenzara la corte marcial en Fort Hood).
El béisbol no se encontraba entre sus deportes favoritos, pero era tan bueno que los Monarcas de Kansas City le ofrecieron contrato como shortstop, devengando 400 dólares mensuales.
Robinson bateó .387 con los Monarcas. Mientras tanto, Branch Rickey envió a su jefe de scout, Clyde Sukeforth, antiguo catcher, a observar a Robinson. Sukeforth se impresionó: "Mientras más conoces al muchacho, más impresionado quedas... está lleno de determinación".
El 29 agosto de 1945, Rickey convocó a Robinson y Sukeforth en su oficina en Brooklyn. Sukeforth recordó como comenzó aquella histórica reunión: "Presenté a Robinson al Sr. Rickey, quien dijo: "Jack, he estado buscando a un gran jugador de color durante mucho tiempo. Tengo ciertas razones para creer que tú eres el hombre. Lo que necesito es más que un jugador de pelota. Necesito a un hombre que soporte abusos e insultos. En otras palabras, que lleve la bandera por la competencia. Si los jugadores se desplazan en la almohadilla con la intención de herirte y comienzan a decirte negro y esas cosas, elúdelos porque sí no lo haces toda la causa por la que luchas retrocederá 20 años.
¿Por qué seleccionó el Sr Rickey a Jackie Robinson, y no a Satchel Paige, Josh Gibson o Ray Dandridge, quienes se encontraban mejor establecidos en las Ligas Negras?. Robinson reunía la mezcla de la inteligencia, carácter y fortaleza que necesitaría para soportar con sumisa dignidad el reto que afrontaría.
"¿Sr. Rickey, usted quiere a un jugador de pelota que le tema a sus enemigos?" Preguntó Robinson. Rickey contestó "quiero a un jugador con el valor suficiente para no pelear. Tu simbolizas una causa crucial. Un incidente, un solo incidente, puede retroceder la causa 20 años atrás".
Hubo una pausa prolongada, "Sr. Rickey", dijo finalmente Robinson, "si usted quiere llevar esta jugada adelante, le prometo que no habrá incidente alguno".
El 15 de abril, hubo 26.623 espectadores en el Ebbets Field durante el Opening Day, de los cuales 14.000 eran afroamericanos, y fueron a ver al primer negro en pisar grama grandeliga en la historia del béisbol moderno.
El mismo juego fue anticlímax. Los Bravos de Boston mantuvieron a Robinson sin hit. "Hice un miserable trabajo", recordó Robinson, pero Brooklyn ganó 5-3, y la sola presencia de Robinson en escena agitó a la audiencia. Los aficionados negros reaccionaron ante todo lo que Robinson hizo en el campo, como así también lo hicieron aficionados blancos. "Todos gritaban Jackie, Jackie, Jackie", recordó un espectador judío, "y yo grité con ellos". Y repentinamente me percaté que detrás mío alguien gritaba "Yonkel, Yonkel, Yonkel", que significa Jackie en hebreo.
Fue insultado verbalmente, batió con los spikes cuando los jugadores se acercaban a la primera base, y golpeado cuando se encontraba en la caja de bateo. Soportó todo eso gracias a la promesa hecha a Branch Rickey. Robinson calmado y dejó que su ofensiva, defensa hablaran por él. Esa hablada fue clara. Robinson conmocionó al público con su manera de correr, robando 29 almohadillas, además de su producción, average, 12 jonrones y 125 carreras anotadas.
Los Dodgers ganaron el banderín y establecieron record de asistencia de espectadores en el viejo circuito, al tiempo que Robinson fue seleccionado como el primer "Novato" en la historia de la Liga Nacional y del béisbol en general.
Sus compañeros, que una vez se rehusaron a jugar con el, ahora lo defendían. Robinson se había convertido en el líder de uno de los equipos más finos en la historia de Brooklyn.
Aunque en su primer año en las Mayores actuó como primera base, Robinson se convirtió en un sobresaliente segunda base. Lideró la vieja liga durante cuatro temporadas consecutivas robándose 19 veces el home durante su carrera.
En 1949, finalmente se sintió más confortable al poder revelarse de sus delatores, y la Liga Nacional apoyar la causa al otorgarle el galardón al jugador liderando su circuito en average (.342), además de anotar 122 carreras. Entre 1949 y 1953, promedió 108 carreras anotadas y 93 carreras después de su retiro tres años más luchando ante las injusticias hasta que se quitó la vida en 1972, a la edad de 53 años.
Cuando dejó el terreno de juego sus números fueron: average de .311, 1.382 juegos, 4.877 apariciones legales, 947 carreras anotadas, 1.518 hits, 273 dobles, 54 triples, 137 jonrones, 734 carreras remolcadas y 197 bases robadas.
En marzo de 2005 estuvo de visita en nuestro país Milton Jamail, ciudadano estadounidense, doctor en Ciencias Políticas, profesor en la Universidad de Texas y destacado estudioso del béisbol de área del Caribe desde más de 20 años, y se refirió a la preponderante presencia de jugadores nacidos fuera de los Estados Unidos de América. "Las Grandes Ligas no serían posibles sin extranjeros", dijo Jamail acerca de el impacto desarrollado por los jugadores foráneos en el mejor béisbol del mundo.
Jamail explicó que 30% de los bigleaguers no son estadounidenses, y provienen del resto del mundo, incluyendo países como Venezuela, República Dominicana, Puerto Rico, México, Japón, Corea del Sur, Canadá y Cuba, entre otros. Además, hizo énfasis en la década de 1990, cuando habían 120 peloteros venezolanos en las sucursales de las Mayores, cifra que se ve opacada ante los más de 1.000 jugadores que las integran hoy en día. Cuando en 2005 se cantó por primera vez la voz de playball en las Mayores, de los 829 grandeligas activos -incluyendo a los que se encontraban en la lista de incapacitados-, 23,5% nacieron en República Dominicana, Puerto Rico, México, Venezuela y Cuba, de acuerdo a la oficina del comisionado de las Grandes Ligas, Bud Selig. Casi el 40% de los peloteros que participan en las ligas menores provienen de los cinco países anteriores.
Desde el último tercio del siglo XIX, y hasta mediados del siglo XX, en el béisbol de las Grandes Ligas era prioritaria la participación de estadounidenses de raza blanca, es decir, los cubanos que habían logrado escalar tan alto eran de piel clara, pero no escapaban a la discriminación por su nacionalidad, e inclusive, hubo actuaciones de indios a quienes se les permitían jugar pero con cierto distanciamiento, aunque no escaparon de las burlas y tratos despectivos a través del vocabulario. Por ejemplo, el lanzador Charles Albert Bender, miembro de la tribu indígena Chippewa e integrante del Salón de la Fama en Cooperstown, le era aplicado el término peyorativo Chief (jefe).
Estas discriminaciones permanecieron durante muchos años en el béisbol, y en la sociedad estadounidense en general, específicamente en el sur, y el progreso para superar la barrera racial se tornó paulatino al extremo.
Jackie Robinson fue la punta de lanza de los Dodgers de Brooklyn en seis banderines y un campeonato mundial, y también fue la piedra angular que hizo posible que tanto afroamericanos y extranjeros actuaran en las Mayores. Ya el béisbol pertenecía a todo el mundo.
El impacto que ejerció en la sociedad fue contundente.
"Pensando sobre las cosas que sucedieron, no conozco a otro jugador el cual hubiese hecho lo que él hizo. Dispuesto a batear con muchas personas gritándole. No se dejó distraer sino que se concentraba en una pelota que era lanzada en cientos de millas por hora. Hacer lo que él hizo debe ser la cosa más sorprendente que yo haya visto en el deporte" Pee Wee Reese, campocorto y excompañero de Jackie Robinson.
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